Cualquier culturista ha oído hablar de los esteroides anabólicos y otros productos químicos que se utilizan para desarrollar músculo. Todos estos medicamentos se inventaron originalmente para el tratamiento de patologías graves, sin embargo, debido a sus propiedades únicas, han ganado gran popularidad en el mundo de los deportes de «hierro».
Los esteroides anabólicos son fármacos farmacológicos que imitan la acción de la hormona sexual masculina: testosterona y dihidrotestosterona. Los esteroides anabólicos aceleran la síntesis de proteínas dentro de las células, lo que conduce a una hipertrofia pronunciada del tejido muscular (en general, este proceso se denomina anabolismo), por lo que se utilizan ampliamente en el culturismo. La acción de los esteroides anabólicos se divide condicionalmente en dos áreas: actividad anabólica y actividad androgénica.
https://anabolicos-enlinea.com/ los esteroides le permiten reducir la ingesta de proteínas, mientras que al mismo tiempo estimulan la formación de proteínas celulares y al mismo tiempo cargan mínimamente el tracto digestivo.
Cómo se toman los esteroides
Cuando se toma por vía oral (en forma de tableta), existe un mayor riesgo de daño hepático y algunos esteroides anabólicos se descomponen en el estómago y el tracto digestivo, por lo que no funcionan. Debido a esto, el método más efectivo para tomar muchos esteroides anabólicos es mediante inyección, aunque las agujas conllevan sus propios riesgos para la salud. También son populares las cremas y los geles que se absorben a través de la piel.
El apilamiento es un esquema para usar dos o más esteroides orales o inyectables con la esperanza de obtener mejores resultados. Las dosis varían y pueden ser muchas veces más altas que la dosis prescrita terapéuticamente para diversas enfermedades.
El ciclismo es el protocolo de uso más popular. El ciclismo implica tomar un curso de esteroides, detenerse (para permitir que el cuerpo restablezca los procesos normales) y luego reiniciar. Esto se puede hacer con dosis piramidales, con dosis más pequeñas aumentando lentamente hasta un pico y luego disminuyendo lentamente hasta detenerse por completo.
Uso por atletas
El uso de esteroides anabólicos por atletas, especialmente atletas para quienes la velocidad y la fuerza son características competitivas importantes, se ha generalizado. Los efectos de aumentar la masa muscular y reducir la grasa corporal son deseables en varios deportes y en el culturismo competitivo.
El uso de esteroides en los deportes es ilegal y los atletas pueden ser examinados para detectar su presencia. Entre muchos otros ejemplos, Ben Johnson, un velocista canadiense que ganó una medalla de oro olímpica en los 100 metros en 1988, usó estanozolol y finalmente fue prohibido.
En la era moderna, los atletas profesionales tienden a evitar los esteroides convencionales y usan métodos más sofisticados, tal vez usando testosterona natural y hormona de crecimiento humano, que son más difíciles de detectar en cantidades anormales en orina o análisis de sangre. Los esteroides anabólicos se detectan fácilmente, aunque se han utilizado agentes enmascarantes con cierto éxito.
Las nuevas formas sintéticas de esteroides anabólicos se denominan esteroides de diseño y los análogos de testosterona se crean constantemente en los laboratorios, lo que dificulta que las autoridades antidopaje deportivas detecten estas sustancias.